Fundamentación

LA SILLA VACÍA

La realidad social, cultural, y económica, de los últimos años ha llegado a impactar la vida, no tan solo de adultos, si no de niños y jóvenes. La pobreza, el desempleo, la desigualdad social, por mencionar algunos ha tenido un impacto directo con respecto a la escolarización de estos niños y jóvenes no permitiéndoles alcanzar satisfactoriamente los objetivos mínimos de aprendizajes.

Por otro lado, las propuestas que ofrece la escuela son pocos atractivas a los ojos e intereses de los alumnos que transitan nuestras escuelas a diaria. También ocurre que los recursos, que muchas veces cuenta la escuela, no son aprovechados por los docentes en su totalidad.

Ante este contexto, con los alumnos de 4 año, del Instituto San Francisco Solano, se crea el proyecto “La silla vacía” que busca en primera instancia conocer la realidad de los adolescentes en cada institución de la ciudad. Donde los protagonistas serán sin dudas los propios alumnos, los cuales se integran el proyecto junto con los docentes que servirán de guía en toda esta trayectoria.

“La silla vacía” es un proyecto interdisciplinario donde cada docente desde su respectivo espacio y cada alumno es una parte vital del proyecto aportando y conociendo más sobre esta realidad.

La escuela tiene un papel central a lo que respeta que los alumnos puedan terminar sus estudios, sin embargo, la realidad que viven los adolescentes y jóvenes requiere la necesidad de ampliar las estrategias con nuevas visiones, herramientas, recursos, acuerdos y ubicar al alumno como protagonista de su propio aprendizaje, estas realidades tan diferentes requieren respuestas integrales.  

“La silla vacía” busca conocer la realidad de cada institución del medio, ya que, mediante esta información, se buscará idear y llevar a cabo estrategias para una detección temprana y de esta manera atender aquellas situaciones que se encuentren en más riesgo de abandono. Reforzar los vínculos de confianza entre los equipos de enseñanza, estudiante y las familias, junto con la utilización de recursos locales se buscará mitigar el abandono de los adolescentes y jóvenes del sistema educativo.

La integración de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) al proyecto es un recurso valioso ya que permite - como lo mención en su libro Tapia Sasot - ampliar la mirada, para desenvolverse mucho mejor en distintos escenarios, donde los estudiantes encuentran un correlato en lo que viven en su comunidad y comparten a través de las redes sociales.  

El uso de las TIC va a permitir, que cada integrante de “La silla vacía” pueda reconocer sus intereses y de esta manera definir su rol individual y/o colectivo dentro del equipo de trabajo. La integración de las TIC es muy necesaria para llevar a cabo el proyecto, ya que permite, por otro lado, extender los límites de la Institución.